viernes, 30 de noviembre de 2012

Bien sabe Dios lo que me cuesta


Soy humana y tengo dudas. No sabía si compartir o no esta imagen pero mi ética periodística se impone sobre mi fanatismo hacia la mejor cantante de todos los tiempos...
¿Qué me dicen de esta imagen?

jueves, 29 de noviembre de 2012

Sara Montiel también tiene la gripe

Revista "Lecturas" 5/12/1969

El títular no puede ser más interesante: "Sara Montiel también tiene la gripe", seguramente eliminaron el subtitulo: la estrella se solidariza con los mortales
Eso sí: griposa pero con peluca. Una puede estar al borde de la muerte o a punto de enseñar su piso a una inmobiliaria pero jamas sencilla o de estar por casa. 
La siguiente foto es sin duda la que demuestra el sufrimiento y el dolor al que se expone Sara. No puedo más que sentirme conmovida ante esos ojitos griposillos y la forma en que se tapa la garganta para preservarla del frío. 



Durante su retiro Sara aprovecha para ponerse al día con los grandes clásicos, acaba de terminar de leer "Cañas y Barro" y comienza "La regenta". El texto del artículo no tiene desperdicio alguno pero si leen atentamente los pies de foto descubrirán la tragedia absoluta: Sara no pudo ir a la boda de Massiel por culpa de la gripe... Precisamente en la foto se encontraba llamando a "Massi" (por cierto que observen el teléfono minimalista de Sara)


Por último me gustaría resaltar los ejemplos de interiorismo que nos da Sara en esta generosa exclusiva: los marcos de los cuadros, la combinación de telas, el cabecero... Sin estas fotos Philip Starck nunca habría hecho carrera.


Te queremos SARA

Devuelta que no envuelta

Queridas Frifris:

Ya he regresado. Siento mi ausencia.
No sé cual fue el motivo...El destino, el cansancio, la desazón... la incansable vibración del corazón... Como decía la Jurado: "todo empezó por que pequé, por lo visible y lo invisible... por que creció la cordillera del rencor con su ladera inaccesible"... por lo que sea decidí cambiar y ser una mujer sensata y ordenada.
Ahora regreso madura y limpita... con muda nueva y millones de revistas viejas que escudriñar y compartir con ustedes, queridas esbirras...
Y regreso desde cero para marcar una nueva senda de gloria.
Como decía el real zángano: No volverá a ocurrir.